Para los empleados, sus jefes son la cara de la empresa: toman decisiones, supervisan tareas, representan cambios y reglas, marcan el camino a seguir, etc.
Por ello, cuando de motivar, retener y mejorar la calidad de vida laboral se trata, es necesario contar con diferentes tipos de liderazgo en tu organización.
¿Por qué? Los líderes son los embajadores. Sus acciones tienen efecto directo en los colaboradores y por lo tanto es clave conocer quienes pueden ayudar a mejorar tu empresa.
No todas las clases de liderazgo se ajustan a todas las industrias o momentos de tu organización, por ello queremos presentarte cinco opciones con sus ventajas y desventajas, junto al mejor momento para dar el giro y ponerlos en marcha.
1. Líderes democráticos: “Equipo ¿qué debemos hacer?”
Los principios de la motivación y el reconocimiento de empleados prácticamente se enmarcan en este tipo de liderazgo.
Como afirma FastCompany, los líderes democráticos o participativos valoran la opinión y participación de los colaboradores que tienen a cargo, pero no olvidan que la decisión final está en sus manos.
¿Por qué son importantes para las estrategias de motivación y reconocimiento?
Este tipo de líderes hacen sentir que las contribuciones del equipo son valiosas y escuchadas, identificando al trabajador como parte importante del proceso de decisión del negocio.
Los colaboradores reconocidos son trabajadores felices y motivados que buscarán seguir aportando más allá de sus tareas.
¿Cuándo necesitas líderes democráticos?
- Cuando la empresa quiere hacer un cambio organizacional que necesita el apoyo de los empleados. El líder democrático hará que su equipo se sienta incluido y, por lo tanto, dados a participar y aceptar.
- Al implementar un programa de reconocimiento.
- En equipos creativos e innovadores.
¿Cuándo no necesitas este tipo de liderazgo?
- No es el más efectivo en emergencias y situaciones donde el tiempo está en contra.
2. Líderes transformacionales: “Equipo, este es el plan de la organización”
Este estilo de liderazgo requiere una política de puertas abiertas, donde la comunicación con las cabezas de la organización no sea un problema.
Se trata de motivar a través de la visibilidad: mostrando a sus colaboradores que hacen parte de un gran plan, un enorme objetivo y todo lo que hacen por él mismo es valioso.
Estos líderes se concentran en la estrategia de negocios principal, delegando tareas bien organizadas a su equipo.
¿Cuándo necesitas líderes transformacionales?
- Al implementar nuevas estrategias
- Para motivar equipos poco productivos.
- Para estructurar un plan de trabajo
¿Cuándo no necesitas este tipo de liderazgo?
- Sus habilidades se pueden desperdiciar en proyectos de corta vida.
Te puede interesar: ¿El liderazgo afecta la retención laboral en las empresas?
3. Líder distante: “Equipo, ustedes saben qué hacer”
Según Chron, solo los equipos más experimentados y entrenados se ven beneficiados de un líder distante.
Se trata de aquellos que no supervisan constantemente a sus colaboradores y no están presentes en todo momento para ofrecer retroalimentación del trabajo realizado.
Grandes empresas como Google o Facebook se caracterizan por aplicar esta clase de liderazgo.
Claramente no son recomendables para todas las empresas y únicamente aplicable a momentos donde no hay crisis.
¿Cuándo necesitas líderes distantes?
- Cuando tienes equipos de alto nivel, preparados e innovadores.
¿Cuándo no necesitas este tipo de liderazgo?
- No son los más eficaces para la mayoría de dinámicas empresariales. Se trata de guiar equipos especialmente talentosos que funcionan mejor sin constante supervisión.
4. Líderes transaccionales: “Equipo, así van a funcionar las cosas”
El liderazgo transaccional está basado en “premiar y castigar” y es común usarlo de forma formativa o académica dentro de una empresa.
Los líderes que usan este método se encuentran delimitando claramente las labores de sus colaboradores, dejando claro los resultados que se esperan.
Los líderes transaccionales tienen todo calculado y medido, pues es la única forma en que los empleados pueden desarrollar la estrategia impuesta, conociendo cuándo serán recompensados y en qué casos pueden ser “castigados”.
¿Cuándo necesitas líderes transaccionales?
- En proyectos operativos y que incluyen trabajo estandarizado.
- En proyectos cortos.
- Al introducir nuevas prácticas en la empresa.
¿Cuándo no necesitas este tipo de liderazgo?
- Para proyectos de largo plazo.
- Para motivar empleados.
- Para buscar innovación.
Seguro este tema te será útil: Cómo motivar a los empleados en época de crisis financiera
5. Líderes autoritarios: “Equipo: hagan esto”
Como explica Harvard Business Review, el liderazgo autoritario es prácticamente lo contrario al democrático.
No quiere que sus colaboradores hagan parte del proceso de decisión, en cambio imparte órdenes de forma autoritaria, sin esperar resistencia y implementando solo su visión.
Aunque parezca una forma de liderazgo que afecta la motivación y la retención laboral, la realidad es que responde a ciertos escenarios específicos.
¿Cuándo necesitas líderes autoritarios?
- Para etapas de crisis.
- Cuando un grupo de empleados necesita supervisión cercana.
- En procesos rápidos de producción.
¿Cuándo no necesitas este tipo de liderazgo?
- En equipos creativos puede minar la innovación.
- A largo plazo puede alimentar la rotación de personal.
El líder perfecto para tu empresa no hace parte de una sola categoría. Recuerda que tu negocio pasará por muchas etapas y tendrá diferentes necesidades, para todas deberás implementar el liderazgo indicado.
¿Quieres conocer cómo las empresas más grandes del mundo manejan a sus colaboradores? Descarga nuestro ebook gratuito ‘Cómo adaptar los mejores planes de retención del mundo a tu negocio’ dando clic en el botón: