No todos los momentos de una empresa son buenos momentos. Las situaciones del mercado, cambios legislativos o el crecimiento de la competencia son algunos factores que pueden darle a su negocio una mala época. Con ventas reducidas y gastos por las nubes, las cabezas de la organización podrían considerar que la preocupación sobre cómo motivar a los empleados no es prioridad para contrarrestar la crisis: si ese es el caso, estarían cometiendo un error.
Aunque plantearse constantemente cómo motivar a los empleados no es exclusivo de las épocas de crisis, en momentos complicados puede hacer una verdadera diferencia. James K. Harter, Ph.D de Gallup, lo resumió de forma correcta en el artículo Construyendo retención en la crisis económica: “En los buenos momentos, la retención de empleados hace la diferencia entre ser bueno o ser grandioso. En los malos momentos, es la diferencia entre sobrevivir y no hacerlo”.
Básicamente la idea es la siguiente: si una empresa está en crisis, no puede darse el lujo de tener una crisis de motuivación en sus empleados. Por ello, es importante tener en cuenta las siguientes claves sobre cómo motivar a los empleados en épocas de crisis financiera:
No descuide la comunicación
Según el artículo Cómo mantener motivados a sus empleados en una crisis, publicado por The Guardian, la comunicación en medio de malos tiempos debe ser:
- Comprensiva.
- Creíble.
- Moverse en ambas direcciones (empleado y empleador).
Esto permite que la comunicación de equipo llegue a un nuevo rango de importancia, donde el compromiso es fácilmente identificado y las nuevas ideas discutidas. En ese nuevo contexto trate de comunicar la mayor información financiera posible sobre la crisis, sin ocultar obvias verdades que pueden minar la confianza. Cuando haya entablado un diálogo más abierto con sus empleados, monitoree las fuentes de desmotivación.
En grandes empresas debe diseñar cuestionarios o grupos focales, que le permitan reunir y comparar preocupaciones colectivas que tienen sus trabajadores. Estos deben notar que sus opiniones son tomadas en cuenta y con ello se fortalece un sentimiento de unidad.
Cualquier mejora en el aspecto mencionado o sobre la crisis en general debe ser comunicada. No retenga información positiva para su equipo. En ese mismo terreno, sea claro sobre qué espera de su equipo de trabajo, así parezca información obvia: el mal momento puede distraer a los empleados de los aspectos que antes daban por sentado.
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Monitoree a los jefes de áreaTodas las actitudes de los líderes afectarán la motivación de los empleados que tienen a su mando. Diseñe estrategias de unificación que sean implementadas por los jefes de área, que estén alineadas con la nueva visión de la empresa. Recuerde que, para los trabajadores, los líderes son la primera cara de la compañía, por lo tanto son fundamentales para mantener la motivación.
En ese campo, Gallup recomienda que los jefes de área trabajen en el desarrollo de sus empleados, demostrando que a la empresa le importa su material humano en el presente y piensa en el futuro del mismo.
Sea visibleEs hora de implementar una política de puertas abiertas. Esto significa que sus trabajadores pueden acercarse en cualquier momento, con el asunto que crean necesario, para discutirlo con un superior o directamente con la cabeza de la compañía.
Como parte del departamento de recursos humanos, esté dispuesto a:
- Aceptar quejas.
- Responder preguntas sobre el desempeño de la compañía.
- Mantener un tono positivo.
- Invertir más tiempo en informar y escuchar.
- Normalizar la crisis: es algo que uede pasar en cualquier empresa de cualquier industria, cree un discurso sobre ciclos basado en esa idea.
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El reconocimiento es la clave
Un empleado que es reconocido por sus labores es un trabajador motivado. Preguntarse “¿Cómo motivar a los empleados?” se convierte en “¿Cómo diseñar estrategias de reconocimiento?”. Es una lógica simple: si su empresa está pasando por una crisis, esto quiere decir que el trabajo extra y bien implementado es oro. Por ello esté atento a los equipos y trabajadores que hacen grandes contribuciones, que trabajan extra y que entregan resultados más allá de lo esperado.
Cuando su equipo se esfuerza por superar una crisis, lo mínimo es reconocer ese trabajo. Si no lo hace, puede que desistan de producir a ese nivel: sentirán que los esfuerzos son inútiles, no están siendo identificados o no les funciona a nivel individual. Por más que desee pensar en la “gran familia” de su empresa, la visión individual siempre está primero y el reconocimiento es una forma de alimentarla de forma positiva.
Los reconocimientos no necesariamente deben ser monetarios (claramente no es la mejor opción en medio de una crisis), pueden ser pequeños regalos, alguna flexibilidad en el horario laboral o una comunicación que llegue a ojos de toda la empresa.
El Ph.D Donald O. Clifton, lo pone en las siguientes palabras:
“Nunca somos tan fuertes como el momento en que tenemos nuestros logros claros en la mente”.
Recuerde monitorear a los jefes de área para que implementen su propio plan de reconocimiento, aun en tareas que antes no llegaban a esa categoría.
Cree grupos especiales
Una forma de combinar un sistema de reconocimiento, escuchar a sus empleados y ganar nuevas ideas, es crear grupos especiales que estén estructurados para resolver problemas internos. Las contribuciones que van más allá de lo pactado en las labores previas del empleado son más fáciles de reconocer de esa forma.
Estos grupos pueden tener tareas como:
- Realizar análisis entre pares.
- Generar nuevas ideas para distintas áreas.
- Definir estrategias de reconocimiento.
- Desarrollar ideas sobre adquirir clientes.
- Monitorear a la competencia.
Cómo motivar a los empleados ayuda en la realidad
En la investigación Retención en el trabajo: su efecto en el rendimiento continuo a través de tiempos económicos duros, realizada por Gallup en 2016, donde se examinaron 82.248 negocios y 1.8 millones de empleados, en 49 industrias de 73 países, la importancia de la motivación laboral frente al rendimiento de la empresa quedó comprobada.
En general, la mitad de las organizaciones que tienen empleados motivados y comprometidos, doblan las probabilidades de ser exitosos frente a la mitad de las organizaciones que no tienen buenas cifras en el tema.
El estudio revela que los empleados comprometidos afectan nueve aspectos clave de un negocio:
- Reducen el ausentismo en un 37%.
- Reducen la rotación de empleados en un 25% (en organizaciones con alta rotación).
- Reducen la rotación de empleados en un 65% (en organizaciones con baja rotación).
- Se disminuye los errores en contabilidad en un 28%.
- Hay 48% menos incidentes de seguridad.
- Los errores de calidad se reducen en un 41%.
- Las cifras sobre manejo de empleados aumentan en un 10%.
- La productividad aumenta en un 21%.
- Hay 22% más de ganancias.
Mantener a sus empleados motivados es una necesidad constante para su empresa, pero en momentos de crisis es esencial. Solo con un equipo motivado puede salir adelante y mejorar las cifras que están haciéndole pasar un mal rato a la organización. Como cabeza de recursos humanos es una tarea infaltable mantener la motivación como una prioridad a la hora de diseñar estrategias internas.
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