Pausas activas

Pausas activas en el trabajo: ¿por qué son necesarias?

21 Enero 2024

En el ajetreado mundo laboral actual, donde las demandas son constantes, es imperativo reconocer la trascendental importancia de las pausas activas. En este artículo, Pluxee, antes Sodexo te invita a explorar a fondo por qué estas breves interrupciones en la rutina diaria son más que simples momentos de descanso.

pluxee canasta

Con Pluxee Canasta entregas alimentación, bienestar y ahorro

La necesidad de las pausas activas va más allá de los índices de producción de las empresas.  

 “Al menos un 60% de la población mundial no realiza la actividad física necesaria para obtener beneficios para la salud”.  Organización Mundial de la Salud.

A lo anterior se le conoce como sedentarismo, y no solo priva a las personas de favorecerse del ejercicio, también puede afectar su salud física y mental.

Por desgracia, los espacios de oficina con largas jornadas frente a un computador son un terreno donde el sedentarismo y la inactividad están al orden del día ¿cómo puedes enfrentar este problema? Queremos mostrarte la importancia de las pausas activas y verlas como una solución rápida y sencilla.

 

Definición de pausas activas

Como lo define la clínica San Pablo, las pausas activas son breves periodos de tiempo durante la jornada laboral donde los colaboradores, a través de diferentes ejercicios, pueden reducir la fatiga muscular y prevenir problemas osteomusculares (en los huesos, articulaciones y músculos). Como lo afirma la fuente, las pausas activas no deben tomarse como periodos muertos de tiempo; estos son espacios de actividad física donde el trabajador está evitando problemas de salud que pueden afectar su productividad.

8 beneficios de las pausas activas

  • Disminuye el estrés
  • Reduce la tensión muscular.
  • Previene los espasmos musculares y las lesiones que pueden generar.
  • Ayuda a la concentración.
  • Estimula la circulación.
  • Ayuda a recuperar la energía.
  • Relaja a las personas.
  • Promueve el autocuidado.

El riesgo del sedentarismo

La revista especializada en salud ocupacional, HSEC, afirma que la falta de pausas activas durante la jornada laboral es un factor que alimenta el sedentarismo y, por lo tanto, ayuda a aumentar la posibilidad de sufrir distintos tipos de enfermedades.

  • Las rutinas de oficinas estás llenas de factores de riesgo:
  • Las malas posturas (que pueden acentuarse cuando hay pereza o estrés).
  • Los movimientos repetitivos.
  • Varias horas sentado.
  • Varias horas de pie.
  • Exceso de sobrecarga articular (esto se debe a posiciones incomoda o los mencionados movimientos repetitivos).
  • Exposición a factores adversos como vibraciones, bajas temperaturas, baja iluminación (o intensa), etc.

Las mencionadas condiciones de trabajo aumentan la probabilidad de desarrollar lesiones en el puesto de trabajo, algo que afecta directamente la productividad de las personas. Piénsalo de esta forma ¿es mejor que tu colaborador use 5 o 10 minutos en una pausa activa o prefieres que un dolor lumbar o una tendinitis afecte su trabajo todo el día? Las dos lesiones son solo algunas de las cuales pueden afectar a un trabajador por su rutina:

  • Dorsalgia: dolores en la zona de la columna vertebral que coincide anatómicamente con las costillas.
  • Cervicalgia: dolor de cuello.
  • Síndrome del túnel carpiano: presión excesiva en la muñeca que afecta el movimiento de la mano.
  • Epicondilitis: dolor en el codo.
  • Dependiendo de las condiciones ambientales, se suman a la lista otro tipo de enfermedades oculares o auditivas.

Mayores factores de riesgo

La continua inactividad física no es el único riesgo para la salud; como lo mencionamos anteriormente, factores como el movimiento repetitivo pueden empeorar los efectos negativos del sedentarismo. Como lo recuerda la mencionada publicación de salud ocupacional, hay dos factores de riesgo que se pueden presentar fácilmente en una oficina:

  • Mala postura: estar sentado de forma incómoda por horas genera dolores de cuello, fatiga muscular, dolor de espalda, contracturas musculares y estrés. Los efectos negativos pueden contrarrestarse (en parte) con pausas activas para activar las articulaciones.
  • Sobrecarga en el sistema muscular: quienes trabajan movilizándose constantemente en bodegas o archivos, pueden presentar molestias por fatiga muscular, dolor lumbar, hernias y mucho más.

Como puedes notarlo, el objetivo de las pausas activas no es únicamente poner en movimiento al colaborador, también se trata de diversificar los movimientos monótonos que realice por sus labores.

Las consecuencias de no hacer pausas activas aumentan los riesgos para la salud, que son muchos, pero el tiempo que puedes gastar en hacerlas, es poco, así que implementa esos espacios para complementar tus estrategias de calidad de vida laboral en el trabajo.

5 ideas de pausas activas en la oficina

Las organizaciones empresariales, con la ayuda de las ARL, identificarán el lugar más idóneo para la realización de las pausas activas, teniendo en cuenta que debe ser en sitios cercanos o incluso en los mismos puestos de trabajo (corredores o las intersecciones de estos, la cafetería, salones dispuestos para este fin). Adicionalmente, se debe garantizar la seguridad y salud de los trabajadores, adoptando todas las medidas necesarias de higiene y protección de los trabajadores determinadas por Salud Ocupacional de las empresas.

Con base en ello, y sabiendo la importancia de las pausas activas, te damos estas cinco ideas para hacerlas en la oficina:

 1. Sesión de estiramiento en el mismo puesto de trabajo: Muchas veces por las ocupaciones de nuestros colaboradores, no pueden desplazarse hasta un sitio en común donde realizar estiramientos, por ello, selecciona un encargado de las pausas activas que pueda dirigir los ejercicios requeridos por cada zona de trabajo donde el colaborador no tenga que desplazarse.

2. Pausas activas con refrigerio: El alimento en medio de la jornada de trabajo es muy importante para tener activos a nuestros colaboradores, por ello, una buena recompensa para que tus colaboradores hagan la pausa activa, es darles un pequeño refrigerio por participar todos juntos en la sesión de la pausa activa.

3. Poner en la agenda digital el espacio de la pausa activa: Un excelente medio para recordar que se deben realizar las pausas activas, es separar el espacio en nuestra agenda digital, pues este tipo de tecnología puede avisar a los colaboradores que hagan la pausa activa, incluso, 30 minutos antes.

4. Seleccionar un líder de pausa activa y darle una recompensa por ello: En una oficina, siempre hay un colaborador líder que se destaca por su buena actitud de liderazgo. Son este tipo de colaboradores los que se deben elegir para que diariamente, sea quien incentive la realización de la pausa activa, asumiendo el liderazgo de la misma y ejecutándola en la oficina. Para ello, es bueno un sistema de recompensa a estos líderes, en donde, se pueda dar algún detalle significativo por dirigir a su grupo de la oficina en tan buena práctica.

5. Poner música en el momento de la pausa activa: En los momentos donde se invita a los compañeros de la oficina a realizar la sesión de estiramientos, acompañarla con música movida, puede generar una activación cerebral y muscular que no sería igual sin el ritmo que puede generar determinados géneros de música.  

Esperamos te haya gustado este blog donde pudimos revisar la importancia de las pausas activas en el trabajo y que puedas empezar a implementarlas o darles mayor importancia del que hoy pueden tener en tu organización. 

Pluxee Canasta 2

Conoce el marco legal y todos los beneficios tributarios de los bonos y tarjetas Pluxee Canasta

Asesoramos a tu empresa